ELABORAR UNA IDENTIDAD ES UN PRIVILEGIO QUE SÓLO EJERCEN AQUELLOS QUE TIENEN LA POSIBILIDAD DE ELEGIR Y QUE LUEGO MANTIENEN EL ESFUERZO DE PENSAR.




17 de julio de 2008

YA NO ME PUEDO CASAR.

Creía que cuando me hice mis primeros piercings ha había escuchado bastantes patochadas como para no aburrirme en un tiempo, es más, algunas eran tan buenas que merecía la pena pensar un poco en el tipo de mente que las había elucubrado. Simplemente por la simpleza o idiotez tan monumental que sus labios se habían atrevido a soltar antes que su cerebro pudiera procesar la frase y saber lo que realmente estaba queriendo decir.

Lo cierto es que ciertas sandeces provenían de mi propia familia como: “¿Te quitarás los pendientes cuando vayas a la boda de tu tía? ¿verdad?”. Lo cierto que cada vez que había un evento especial me decían lo mismo, pero la cosa no se quedaba ahí, miles de persona más me lo dejaban caer como quien no quiere la cosa. Por supuesto a mi madre no le iba a contestar de la misma manera, pero a más de una le rechinaron los oídos cuando les contestaba que yo era así con mis piercing y que no me los iba a quitar para ir a una boda y mucho menos para vestirme de "bonito", es decir, al que no le guste que no mire. Lo malo era que a muchos les gustaba mi aspecto hasta que abría la boquita para defender mis posturas a cerca de la perforación de la carne (en ciertas ocasiones siempre he estado más guapa con la boca cerrada. Todavía no he vislumbrado por qué.)

Después simplemente se fueron acostumbrando a que fuera a todos lados de la misma forma que voy siempre, taladrada y atravesada por unas bonitas circonitas brillantes que recorren ambos de mis lóbulos autiditivos y con unos grandes pendientes en los que me hicieron cuando era chica, yo los llamo "los de nacimiento."

Con el del ombligo pasaron un poco más, teniendo en cuenta que no se me veía cuando no me interesaba, pero con el de la nariz tuvimos más problemas. Mi madre decía que no me dejaría hacerme el de la lengua, cosa que nunca iba a realizar, pero si quería conseguir perforar mi aleta nasal tenía que tomar medidas drásticas y pintar las cosas más negras de lo que eran. Por supuesto lo conseguí, lo cierto que ahora veo un poco ridícula aquella odisea que monté, ya tenía 18 años y podía hacer lo que mejor me pareciese. Pero volvimos al mismo problema, ciertas mentes cotillas y denigrantes volvieron a nombrarme lo de: “cuando tengas una boda” o lo de “cuando te vistas de fiesta”, pues me buscaré un pendiente bonito para adornar y ya está; no encuentro mayor problema, que tú lo ves feo, pues no te lo hagas. Yo si puedo aceptar que eso no forme parte de la visión que tu tienes de estética.


Lo mejor de todo ha venido cuando hasta hace a penas unos días me hice un tatuaje, lo cierto es que me lo llevaba pensando bastante tiempo y por fin, como hago siempre, declaré al mundo mi decisión irrevocable. A alguno le costó trabajo aceptarlo, pero se portó como el mejor de los campeones, hasta vino conmigo a escogerlo. A otros no les vino de sorpresa, ¡conociéndome iba ya tarde para lo que yo soy! (declaraciones expresas de una amiga) y ciertos individuos pensaban que ya lo llevaba por el simple hecho que llevo piercings; no todos siguen las dos corrientes a la vez.

Cierto es que el pintado permanente de la piel no está muy bien visto, por suerte, ahora menos que antes. Pero no eso no quita que me encante. La verdad que todo esto, es como una operación de cirugía estética, tú ves algo que no te gusta, querrías esconder, decorar o mejorar y vas a un especialista en el campo para que te subsane el problema por un módico precio, tú eres feliz, es para toda la vida, el tiene otro cliente satisfecho y espera verte por allí pronto y/o que se lo recomiendes a tus amigos. Simple.

Lo que pasa es que te metan dos bolsas de silicona líquida, entre otras cosas, para aumentarte el volumen de pecho, porque tienes un complejo terrible, te gustaría tener más, tienes envidia de tu vecina del quinto que todo el mundo le mira su escote, es la moda, etc, etc, etc,…. Está muy bonito, te quede como te quede. Ya puedas tener los labios tan grandes como los de Angelina Jolie, solo que a ella le quedan bien (entre otras cosas nació con ellos) y tú pareces un gato mareado después que un perro lo haya sacudido por el rabo, pero eso si es “estético” (por decirlo de alguna manera) o, que se yo, de buenas a primeras pasas de una talla 80 a una 100 y te ofendes si te dicen que son puestas (a mi me encanta enseñar lo que me he hecho) o te quejas que todos te miran ( yo que ellas iría al psiquiatra). Con los hombres pasa tres cuartos de lo mismo, ya no sabes si las tabletas de chocolate que lucen son de verdad o de silicona; lo cierto es que son igual de repugnantes. Y esos pechos, nunca aceptaría que mi pareja tuviera más tetas que yo.

¿Eres más feliz desde que te hiciste ese pequeño “arreglillo”? Yo también, es como una parte incompleta de mi que he de perfeccionar hasta que esté satisfecha con ella igual.

Bueno, me he desviado del tema, lo que iba a comentar era que ahora que no me puedo quitar mi operación de cirugía menor, por llamarlo de alguna forma. He escuchado miles de tonterías pero la que se lleva la palma es, atención.

- Eso queda muy feo con un traje de novia puesto. Yo hubiera esperado después de la boda, aunque yo nunca me lo haría, la verdad. – respiró un poco y añadió. - Ahora tus trajes tendrás que llevar mangas cortas a las fiestas para que no se vea.

Siempre pongo los comentarios por separado porque me lo dicen personas distintas, pero no podía creerme que tantas chorradas me lo dijera una sóla persona, en menos de un minuto, casi sin respirar y se quedara tan pancha. Por supuesto le contesté, pero analicemos uno por uno los puntos, que es mas divertido.
  • Eso queda muy feo con un traje de novia puesto. (Si en mis planes no entra casarme. A todo esto, sería una buena excusa para no hacerlo.)
  • YO hubiera esperado después de la boda. (También puedo esperar a que el sol se hiele para ponerme el abrigo de piel porque queda muy, ¿cómo lo diría? ¡Oh sea!)
  • YO nunca me lo haría. (A mi eso como que no me interesa para nada, como si te quieres tirar por un puente)
  • Ahora te tendrás que poner trajes de fiesta con mangas para que no se te vea. (¿Entonces para qué me lo he hecho? Espera, es que el protocolo exige que me lo tape para no ofender la vista del que me mire el dibujo ¡tócate los huevos!, es lo más ridículo que he escuchado.)
Y dónde dejamos ese YO, no personalices, si por fuera no haríamos la mitad de las cosas, piensa un poco en que no eres tú soy yo. Parece que estas personas no poseen inferencia. ¡Superficialistas metomentodo!, desde luego que a todo el mundo le gusta decir lo que piensa aunque no se lo pregunten. Un traje de fiesta con mangas para que no se vea, creo que en ese momento el shock le desconectó la razón. ¿Cuántas veces te vas a vestir de fiesta en un año? ¿Cuántas veces te vas a vestir de novia en tu vida?, si te casas. ¡Por favor!, ¿es que he de mantener mi cuerpo impoluto para ese momento?

Lo políticamente correcto no va conmigo, tampoco lo voy a tapar con esparadrapo color carne para que no se note (normalmente no me avergüenzo de lo que hecho.) A mi me parece muy estético, unido a un motón de factores y adornos corporales es hasta sexy. Que llama la atención, si, no puedo negarlo; lo cierto es que nunca pretendí disimularlo, ni eso ni los piercings. Eso es como cuando te pruebas una prenda y te dicen que te queda muy bien porque te hace menos pecho, no te pintes tanto que estás mas guapa, esos pantalones tendrían que ser más anchos, suéltate el pelo para que no se te vean tanto las orejas,... ¿Algunas y algunos de vosotras y vosotros, sabéis lo que estáis diciendo? Contestaré por vosotros. NO, eso es como decir, ¡vale! acepto lo que te has hecho, cómo eres, lo que llevas puesto, pero intenta disimularlo lo mejor posible para que cuadre con mi forma de pensar. Es como cuando la monja con la que das catequesis te dice que la asistencia es libre y de repente faltas un día y te echa la regañina porque no has ido; ¿es libre o simplemente queda bonito de cara a la galería? ¡Cerebros fofos! O se creen que somos tontas y tontos o no entiendo lo que les pasa, ven como los caballos que tiran de los carros, en ángulo recto para que no se entretengan.



Eso es un secreto, no soy tan señorita como la gente piensa:Una bonita apariencia no está reñida con lo que tu quieres.

Es que una mujer tiene que ir siempre acorde con unas formas impuestas, seguramente por hombres o mujeres que no tenían otra cosa en que entretenerse, ¡con lo bien que está culturizarse! Si te sales de ellas malo, si no eres una persona destacada en el mundo del arte, tampoco puedes llevarlo, si no eres un portuario, un hombre, un chusma, un niñato, un pijo sin otro entretenimiento mejor, un descerebrado,….. Está mal visto en una señorita, porque una señorita tiene, una señorita es, una señorita debe, una señorita…. Llegué a odiar tanto esas palabras que me negué a serlo. Ahora lo soy pero, a mi manera: educada (cuando me da la gana), se estar (mientras que no me toquen los ovarios), visto políticamente correcta (el traje de monja lo doné a caridad), soy calladita (ni debajo del agua, siempre digo lo que pienso), obediente (a mi manera). Lo cierto es que hago las cosas como me dá la gana, para mí soy un primor.

Lo afirmo, SOY UNA SEÑORITA que siempre circunda el filo de lo bien y lo mal visto, lo une y forma un estilo propio. Por eso la casilla que marco cuando me dan tres opciones es la de "de vez en cuando".

2 comentarios:

sangreybesos dijo...

No te preocupes por lo de la boda, cariño; seguro que encontramos en alguna tribu a algún chamán que nos quiera casar.

Silderia dijo...

Pero, eso no entraba en mis planes, a demás las plumas no me favorecen y eso de llevar el torso desnudo tampoco me va.