ELABORAR UNA IDENTIDAD ES UN PRIVILEGIO QUE SÓLO EJERCEN AQUELLOS QUE TIENEN LA POSIBILIDAD DE ELEGIR Y QUE LUEGO MANTIENEN EL ESFUERZO DE PENSAR.




23 de febrero de 2009

ESTO TIENE UN NOMBRE Y TE LO VOY A DECIR…

¿No os ha pasado muchas veces, que no veis la razón de porqué dar explicaciones, hacer algo o simplemente de hacer caso a alguien debido a que lo os cuentan no tiene sentido? No, pues no sabéis la suerte que tenéis, aunque de esto nadie se libra. Esto tiene un nombre en mi tierra, bueno, mejor dicho, más que un nombre es una frase hecha, se dice así: ganas de dar por culo. Si señores, os voy a poner algunos ejemplos:

3 de la mañana, un día de diario. Por supuesto estoy dormida (la mayoría de las veces) y suena el maldito teléfono, lo coges asustado, pensando que algo grave a pasado porque no es normal que te llamen a esa hora y….

- ¿Maruchiiii…? – de escucha al otro lado.

- No señora se ha equivocado.

- Lo siento

Y la tía cuelga sin más. Vale, pensaréis, no es para tanto, cualquiera puede equivocarse. Pero si te lo hace la misma persona noche tras noche, a la misma hora, durante tres días seguidos es para ponerse de los nervios. Lo peor no llega cuando te muerdes la lengua invitándola cortés mente a que no llame más; es cuando pasa lo siguiente:

- Si – digo medio dormida.

- ¿Maruchiiii….? – dice de nuevo una voz estridente al otra lado del teléfono.

- Lo siento señora pero se ha vuelto a equivocar.

- Pues yo estoy marcando bien

Y se atreve a contestarme la muy…. Vamos a dejarlo, por supuesto no se quedó exenta de mi opinión. No señora – le dije. – Es que desde hace dos días nos hemos mudado aquí, con este número de teléfono, que tengo desde hace ya unos dos años y a Maruchi la hemos tirado por el puente más cercano.

Por supuesto no contestó, colgó de mala forma. ¡Vendito botón de apagado de los teléfonos fijos! ¿Por qué no lo usaré nunca? El caso es que no volvió a equivocarse, de pronto reconoció los números. Si la cosa es tener razón aún cuando se nota que te has equivocado. Y si la persona que te lo dice es la que está sufriendo tu falta, peor todavía.
Sabéis cómo se dice esto, son ganas de dar por culo, sólo eso.

4 comentarios:

Unknown dijo...

Yo tengo otro ejemplo, mucho más familiar ;) Pongamos que es un diálogo entre mi hermano Alvaro y yo.

-Mario!!! -desde su cuarto, a la otra punta de la casa- Ven un momento!!!
-Para qué!! -sospecho, siempre sospecho-.
-Veeeeen...!! -Con tono de no te lo puedo decir en voz alta y es importante.

Total, que cruzo toda la casa, y me dice cualquier chorrada, o me pregunta alguna cosa de sus deberes que por supuesto no me acuerdo como se hace, y en realidad me ha llamado solo porque se aburre y no le apetece estudiar. Y eso que le he dicho muchas veces que a ver por qué no puede venir el con la puta libreta a preguntarme eso que no voy a saber. Pues muy facil, porque así él no se mueve y, de paso, da un poco por culo

Me ha costado asimilar lo corto del post xD. Un saludo

Silderia dijo...

El post era más largo, pero me gustaba hacer uno corto, aunque sólo fuera una vez en la vida.

sangreybesos dijo...

Deberías hacer un post sobre la cabezonería en la tercera edad. "Pues yo he marcado bien"... es sencillamente brutal. Lo peor es que está convencida de que lo ha hecho, "yo he marcado bien, es usted la que vive en la casa equivocada".

Silderia dijo...

Debería, tu lo has dicho, incluso lo he pensado muchas veces, pero ahora mismo está madurando la idea igual que otras muchas